Monday, June 6, 2011     17:19
 

Primeros correos aéreos

El coronel Charles A. Lindbergh se había convertido en el héroe mundial al atravesar el Océano Atlántico en un solitario vuelo de New York a París en 1927.

Posteriormente realizó un viaje de buena voluntad por toda la América, donde no cesó de recibir el aplauso y la admiración del continente entero.

Nuestro país no escapó a este momento de gloria que se vivía y en la visita del águila Solitaria, cantó con mucho regocijo y felicidad "Lindbergh, Lindbergh, héroe bienvenido/a nuestra tierra del ardiente trópico", que en forma de marcha había sido especialmente compuesta para tal ocasión.

Al mismo tiempo que andaba inmerso en estas actividades protocolares, en su mente bullía igualmente la idea de transportar la correspondencia por vía aérea, para superar las etapas iniciales de correos a pié, por diligencias, por ferrocarril y luego por barcos, que marcaban en todo momento un innegable deseo por acortar distancias mediante el factor de la velocidad.

Con anterioridad, el 19 de octubre de 1918, la Fuerza Aérea del Ejército de los Estados Unidos inauguró un correo de Cristóbal a Balboa, por medio de un avión anfibio que demoró 30 minutos en el recorrido, y que transportaba correspondencia, marcando en esta forma, el primer correo aéreo en Panamá.

Siempre existía el deseo de ampliar el servicio hasta los Estados Unidos y de acuerdo a esta planificación, en octubre de 1920, salió de France Field un avión portando mucha correspondencia, entre ellas una carta del Director General de Correos de la Zona del Canal, el señor Crede Calhoun, quien escribía "espero que este vuelo sea el precursor de un eventual servicio de correos por aeroplano entre los Estados Unidos y Latinoamérica".

Desafortunadamente no se llegó a completar, ya que el avión se vio forzado a regresar a su base, por pésimas condiciones atmosféricas. Como algo irónico, toda la correspondencia tuvo que ser enviada por barco.

La Compañía Pan American Airways, siempre con ideas progresistas e innovadoras, inauguró el 4 de febrero de 1929, un servicio de correo aéreo bimensual, que unía a Miami con Cristóbal en un viaje, que fue dirigido por el mismo Lindbergh, el águila Solitaria de fama mundial, en el avión NC 8000.

Traía 40 libras de correo, cobrándose $0.25 por cada media onza. En el citado avión no venían pasajeros, solo miembros de la tripulación y tampoco se planeaba establecer este último servicio, hasta que existiera una verdadera seguridad y confianza para todos, después de alcanzarla, luego de llevar a cabo varios vuelos.

A las 6:00 a.m. del 4 de febrero ya citado, se inició el vuelo internacional que iba a tener escalas en La Habana, Cuba, en Belice, British Honduras, en Puntarenas, Costa Rica, la ciudad de David en Panamá, y como punto final a France Field en la Zona del Canal, donde arribó el 6 del mismo mes.

El vuelo fue recibido con muchísimo entusiasmo en Panamá, ya que había un claro convencimiento que se estaban abriendo inmensas puertas para el progreso en general.

Aunque las 40 libras de correo representaban una muy pequeña cantidad, aún para los requerimientos de la época, el paso se había dado y la historia del correo aéreo escribía una página gloriosa.

El vuelo de regreso, en cambio, fue un extraordinario éxito y que se inició a las 6:00 a.m. del 10 de febrero de 1929, con 803 1/2 libras de peso que necesitaron la habilitación de dos aviones. Del total señalado, 689 provenían de la Zona del Canal y 114 1/2 de la República de Panamá.

El segundo viaje de Miami-France Field tuvo lugar el 19 del mes de febrero, en un avión anfibio.

El 2 de abril se inauguró un servicio trisemanal entre la Zona del Canal y Miami, aumentando el número de viajes que se habían mantenido desde febrero.

El 1 de mayo se dio comienzo a un servicio exclusivo transístmico para correo y pasajeros, en un avión tipo Fairchild, modelo 71, que cumplió el siguiente itinerario:

  • Salida France Field: ( Atlántico ) 7:30 a.m., 11:30 a.m. y 4:30 p.m.
  • Salida Albrook Field:( pacífico ) 8:00 a.m., 12:00 m. y 5:00 p.m.

A medida que pasaba el tiempo el viajar por los aires iba cimentando la confianza en los pasajeros, hacia la novedosa forma de transporte.

Buena parte de esta seguridad iba también creciendo por las excelentes condiciones mecánicas en que se mantenían estos aparatos y por las campañas publicitarias que impulsó la Pan American Airways con las revistas "VIAJEROS DEL AIRE" que distribuía profusamente en todo el continente americano, que traía numerosos artículos y estadísticas sobre estos vuelos, a la vez que tenía mucho material fotográfico sobre las distinguidas personalidades que usaban esta manera para viajar.

El mes de junio de 1929 tuvo un total de 25000 millas voladas en 257 horas y desde el 3 del mismo mes, se empezó a aceptar pasajeros y correo de David a France Field, con escala en la ciudad de Panamá.

El primer vuelo llevó cinco personas que abordaron el avión, 4 se dirigían a la ciudad capital y la otra iba para Cristóbal ( aeropuerto de France Field ).

El servicio quedó establecido para tres veces por semana en ambas vías. Desde Cristóbal la hora de partida era a las 7:00 a.m., de Panamá a las 7:30 a.m., los días martes jueves y sábados.

El regreso desde David eran los lunes, martes y sábados a las 12:30 p.m.

El valor del pasaje era de $50.00, mientras que ida y regreso costaba $80.00.

El tiempo de vuelo estaba en 2 1/2 horas, otorgándose 30 libras de peso del equipaje, sin cargo para el pasajero, mientras que $0.25 por cada libra adicional.

Tanto el servicio de correo aéreo como el de pasajeros, continuó avanzando en forma increíble, desde aquel vuelo inaugural, que tuvo la fortuna de ser piloteado por el mismo héroe mundial del momento.

También es curioso observar, como desde los inicios de este servicio, David, la capital chiricana, se convirtió en la primera ciudad del interior de la república que gozó del privilegio de esta ruta aérea y de la misma manera, se unió a las alas del progreso, al incorporarse al correo aéreo universal.